jueves, 8 de octubre de 2009

Mujeres, hombres y viceversa



Que todo lo que aparece en la televisión es mentira, no deberia ser algo que nos sorprendiera. Los propios documentales de animalitos o los actuales docu-city tipo Callejeros, Españoles por el mundo...lo que hacen es poner una lupa sobre la realidad, con lo cual lo que llega al telespectador es una “parte” de la verdad, cosa que es inevitable.

Pero lo realmente deplorable es cuando una “mentira” se nos vende como una verdad. Y esto es precisamente lo que ocurre en el más infame de los programas, en un programa que es la esencia pura de la basura, el estiércol de la parrilla, lo que se quema en las plantas incineradoras y su hedor invade a los espectadores dejándoles estupefactos ante la pantalla. Ese programa, esa gran bola de desperdicios que los escarabajos peloteros arrastran, se llama Mujeres, Hombres y Viceversa.

Resumo el contenido de esta gran falacia, de este alimento de ratas. Básicamente se trata de un teatrillo en el que unos señores y unas señoras de unos veinte años, reclutados a lazo de las agencias de modelos de cualquier calle, intentan conquistar al guapo o guapa que le ponen en frente, para aquello de conseguir el “amor eterno”. Con tal objetivo tienen unas citas con su pretendiente o pretendienta en la que intentan gustarse, sin que nunca llegue a verse una caricia fuera de sitio, ni un beso con lengua, ni un calentón que termine en un buen revolcón, todo es de una ñoñez sonrojante. Lo otro lo dejan para luego, cuando ya hayan dejado de hacer su interpretación y vuelvan a la realidad, porque a pesar de repetirme, a pesar de que viendo un pequeño instante de esa abominación, de esa infamia, de ese excremento, cualquiera puede llegar a la misma conclusión, yo insisto: todo lo que ahí aparece es una pura mentira, envasada en un paquete con un lazo rosa que encierra en su interior una enorme y maloliente sorpresa.

Bueno, hasta aquí, podríamos asistir a una obra de teatro, a un vodevil, a una comedia de enredo, sin nada que objetar. Pero no, no se trata de eso, por una parte la presentadora, esa señora que pasó a la fama por presentar el mítico programa A tu lado, mítico cuando hablamos de telebasura, claro.
Pues bien, esta señora de vez en cuando nos dice que todo es verdad, que allí la peña se enamora, sufre, llora en el desconsuelo y toda la historia... Y yo en mi candidez no voy a decir que allí la peña no se enamore, porque seguro que algún cámara se ha enamorado de la de sonido, es posible que el regidor se haya enamorado de algún guionista, e incluso no descarto que alguien del público que asiste, bien tempranito por cierto, a esta mentira se haya enamorado del que reparte los bocatas.

Sin embargo, lo que realmente me deja perplejo es la manera en la que se reparten los papeles, los roles que juegan los protagonistas y la manera en la que se desempeña esa anteriormente señala “seducción”.
Para explicarlo vamos a coger al Gran Líder actual, un auténtico gorila de espalda plateada. Un actor llamado Rafa , famoso en el universo por enseñarnos su tabletita de chocolate a la mínima, y que ya pasó por “la charcutería” hace un tiempo. Resulta que este señor asegura que nunca ha dormido solo porque él tiene a todas las mujeres que desee, él es el número uno en la cama y fuera de ella. Es un matón sin pistola, el “malo” que enloquece a las féminas. Durante el programa este señor humilla a todas sus pretendientas con comentarios denigrantes y profundamente soeces, no se trata de palabras machistas, que también, sino de (para que me entiendas Rafa) “vaciles” para conseguir una sonrisa fácil en el espectador. Y a pesar de eso, todas las que por allí se pasean se pliegan como resortes ante su masculinidad. Curioso, ¿no?. Tengo que decir que él (la persona que hay detrás del personaje) en realidad no tiene la culpa, él sólo interpreta un guión, y por lo visto, lo hace muy bien.
Ahora vamos a hablar de otra de las actrices principales que por allí pululan y a la que llaman “Jenny” . Jenny es una “tía buena”, de esas que cuando atraviesa por una calle crea accidentes de todo tipo debido a la cantidad de cuellos que se giran para admirarla.... Y llegado a este punto, alguien que jamás hubiera visto este engendro, este programa que abre un nuevo estilo: el gore mental, se preguntará: ¿Y es tonta esa tal Jenny?. Y yo respondo: es tonta hasta decir basta, pero tonta, tonta, (insisto, hace el papel de tonta no es que la muchacha sea así cosa que como es obvio desconozco), una tía buena tonta, para ser más exactos. Y claro, esta tía buena tonta, tiene muchos pretendientes que la pasean entreteniéndola con conversaciones de gran profundidad, incluso alguno le pega mordisquitos en el hombro por aquello que la represión del horario infantil no le permite morderle aquello que desea, todo sea por respetar a los teleniños para los cuales, supuestamente, es más perjudicial en su desarrollo cognitivo y espiritual ver un buen beso, que asistir a un aprendizaje por observación de los siguientes roles a seguir:

- Hombre:Supermacho que desprecia de la mujer siendo ésta un mero objeto.
- Mujer: Tía buena tonta, cuya manera de triunfar en la vida es por medio de unas buenas tetas y una preciosa melena.




Así que esto es lo que este programa nos ofrece: Un hombre depredador, un atleta de la seducción, un terminator de las chavalas, la envidia de todos los hombres. Eso por un lado, por otro, una tía buena con una enorme talla de sujetador, con pestaña postiza y tacón alto, que es más tonta que una ameba y que con su voz nasal opina sobre el amor y el desamor como si opinara sobre si es más cómodo llevar braga o tanga.

Expuesto esto, yo me pregunto:
¿Dónde están las feministas que tanto protestan cuando en un anuncio de detergente siempre salen mujeres?.
¿Dónde están los políticos que quieren controlar los contenidos de Sálvame?.
¿Dónde están los gurús de la telebasura? ¿y los predicadores de la ética audiovisual?.
¿Dónde están aquellos que se llenan la boca criticando el actual modelo de televisión?.


A todos estos les recomiendo que se pasen a eso de las 12:30 por Telecinco para que vean que todo lo aquí contado es la verdad, o al menos una parte de la verdad, porque creo que me he quedado un poco corto con mi descripción.

Por cierto, este programa se está extendiendo como si fuera una epidemia de peste y ahora también podemos asistir a un debate sobre los “enamorados” los sábados antes de comer.


Por último una pequeña aclaración, si habéis visto los vídeos, por ejemplo el que aparece en mitad del artículo, donde se ve a unos de los "tronistas" discutiendo acaloradamente con el público, me gustaría señalar que este programa se emite en diferido, NO en directo, por lo tanto si los directores desean podrían haber "borrado" esa exaltación de la agresividad, por ese motivo si se emite es porque quieren que se emita. Supongo que creeran que esas cosas hará que suba la audiencia.

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